Concretamente, la décima añada, del 2012, ha conseguido la medalla de oro en el certamen Tempranillos al Mundo 2015, organizado por la Federación Española de Asociaciones de Enólogos y la Asociación Portuguesa de Enología y celebrado recientemente en Lisboa. La prestigiosa Guía Peñín para el año 2016 le ha concedido 90 puntos sobre 100, los mismos que le ha otorgado la revista americana de referencia Wine Spectator.
Bodegas Torres elabora Celeste Crianza en una pequeña bodega de su propiedad situada en Fompedraza, a poca distancia al sur de Peñafiel, en el corazón de la Ribera del Duero, y a una altura de 900 metros. La intensidad con la que se muestran las estrellas en las noches de vendimia sirvió de inspiración en la concepción del nombre y el diseño de la etiqueta, que se ha mantenido intacto a lo largo de los años. El vino envejece 12 meses en barrica de roble francés y americano, aportando notas tostadas y especiadas que se mezclan con intensos aromas de zarzamoras silvestres.
Celeste Crianza fue el primer vino que la familia Torres elaboró fuera de Catalunya y supuso el inicio de la expansión por las principales zonas vinícolas españolas. Después de más de una década en Ribera del Duero, acumulando experiencia y conocimiento del territorio, Bodegas Torres se está ahora preparando para elaborar un nuevo vino de alta gama, con la compra este año de catorce hectáreas de viñedo para asegurar el abastecimiento de uvas de gran calidad.
© Javier G. Paradelo